viernes, 24 de julio de 2009

HOMOFOBIA EN LAS ESCUELAS - 2 de Agosto, Puerto Madryn

24 de julio 2009; Puerto Madryn

Charla “HOMOFOBIA EN LAS ESCUELAS”

2 de Agosto – 18:00 hs.

Teatro del Muelle,

Avenida Rawson 60 (Entre Av. Hipolito Yrigoyen y Gobernador Gallina),

Puerto Madryn


El FORO DE DIVERSIDADES SEXUALES del INADI Chubut, invitan a todos y todas a participar de la charla “Homofobia en las escuelas” a cargo del Lic. en Psicología Pablo Radusky de SIGLA (Sociedad de Integración Gay Lésbica Argentina), que se llevará a cabo el día domingo 02 de agosto a partir de las 18:00hs. en las instalaciones del Teatro del Muelle de la ciudad de Puerto Madryn, sito en Av. Rawson s/nro.


“La infancia y la adolescencia son etapas del desarrollo en las que se estructuran las bases sobre las que se asentará la personalidad adulta. Particularmente, la adolescencia es el momento de consolidación de la propia identidad sexual y de género y de reconocimiento de la propia orientación sexual. Es el inicio de la construcción de un proyecto de vida adulto que incluye la posibilidad del amor y la formación de una pareja. Por todo esto, cualquier obstáculo en el pleno desenvolvimiento de este proceso de formación y desarrollo en esta etapa puede impactar negativamente en los jóvenes dejando huellas duraderas que podrían afectar sus vidas como adultos de diversas maneras. Entre estos posibles obstáculos se encuentra la homofobia (discriminación por orientación sexual), de impacto especialmente negativo en la etapa en que los y las adolescentes están descubriendo y reconociendo su orientación sexual e identificándose como sujetos deseantes de un/a otr@, de igual o diferente sexo.

La escuela es el espacio en el que much@s niñ@s y adolescentes pasan gran parte de su tiempo y es, en si mismo, un espacio formador de subjetividad, especialmente ideado para acompañar y orientar el desarrollo en esta etapa de la vida. Por eso mismo, le cabe un rol fundamental en el acompañamiento a l@s jóvenes en el proceso de desarrollo y en la prevención de cualquier obstáculo que pueda impactar negativamente en este, incluida la discriminación y la homofobia. La escuela, usualmente espacio de reproducción de la cultura instituida y dominante, con sus representaciones y estereotipos, es también el espacio ideal para la transformación de esa misma cultura y la institución de otra basada en el respeto y la aceptación de la diversidad en general y la diversidad sexual en particular.”

Esperamos contar con su presencia. Favor de difundir la presente información.

¡POR UN CHUBUT DIVERSO!

Sitio Web: http://gaypuertomadryn.blogspot.com
Facebook: Gay Puerto Madryn - Chubut: http://www.facebook.com/group.php?gid=105203994622

El INADI tiene a disposición la línea telefónica gratuita 0-800-999-2345 durante las 24 horas para brindar un servicio de asesoramiento y recibir denuncias sobre actos de discriminación.

INADI / Chubut- Mitre 384 – Puerto Madryn - Teléfono 02965-472108 - e mail chubut@inadi.gov.ar

lunes, 20 de julio de 2009

Intersexualidad

Fuente: Intersex Society of North America

*: el uso del asterisco esta implementado para evitar usar el genérico masculino. La @ tampoco es conveniente en estos términos, ya que implica una derogada dualidad genérica y además es difícil leer por programas utilizados por personas ciegas o ambliopes... .....

En la pregunta "¿Qué es la intersexualidad? " Está implícita una pregunta mucho más difícil: "¿Qué órganos sexuales considera la gente necesarios y esenciales en el hombre y la mujer, para que la combinación de éstos en un determinado cuerpo nos haga cuestionar el sexo de la persona?" En efecto, aunque hay diferencias generalizables entre la mayoría de las personas identificadas como mujeres y hombres, cualquier afirmación estricta acerca de la naturaleza esencial de la femineidad y la masculinidad necesariamente dependerá tanto de la política social como de la Ciencia.

El hecho es que algunas personas nacen con diferencias en el conjunto de órganos usualmente considerados como el tipo "mujer estándar" o el tipo "varón estándar." Es decir, algunas personas nacen con lo que l*s doctor*s llaman "genitales ambiguos": pueden tener un clítoris largo, o un pene pequeño, o un órgano que no es claramente ni un pene ni un clítoris. Algunas mujeres tienen cromosomas XY y algunos hombres tienen cromosomas XX, y hay personas con otras combinaciones, incluyendo XXY, XO, XO/XY. Hay mujeres con testículos internos y hombres con ovarios internos. Esto no es nada sorprendente si se considera que las anatomías sexuales femenina y masculina comparten senderos comunes de desarrollo (en la matriz). La "ambigüedad" sexual puede, por supuesto, extenderse más allá de los genitales, si se define el sexo de las maneras corrientes.

En los años '50, l*s doctor*s desarrollaron una manera de pensar y tratar la intersexualidad. Ellos consideraban esta clase de diferencia sexual como algo intolerablemente monstruoso. Con el fin de salvar a la persona intersex de su destino, se debía usar todos los medios posibles para ocultar la intersexualidad. Las herramientas que los doctores escogieron eran: dar información falsa, usar el secretismo y las cirugías médicamente innecesarias. Ellos decidieron que si usaban cirugías y hormonas para que el/la niñ* intersex tuviera una apariencia más cercana a la de los demás niños y niñas, y si aseguraban a sus padres de que se determinó científicamente que en efecto su hij* era niño o niña, la identidad de género del/a mismo/a y su orientación sexual se desarrollarían de manera acorde.

Hoy, cuando nace un/* bebé con genitales diferentes, l*s doctor*s deciden qué sexo asignarle. Si tiene ovarios y útero, los doctores lo consideran una niña, incluso si tiene genitales masculinos. Ellos miden lo que hay entre las piernas del bebé. Si el pene es más corto de 3/8 pulgadas (un centímetro), el bebé es considerado niña. Si estirado es más largo de una pulgada (dos centímetros y medio), el bebé es considerado niño. Cualquier cosa intermedia es considerada inaceptable y l*s doctor*s harán una cirugía de reasignación sexual y considerarán que el bebé es mujer. Usando estos estándares, l*s médic*s transforman al 90% de los bebés con genitales ambiguos en niñas "porque es más fácil". Si el bebé no tiene vagina, ellos quitarán quirúrgicamente una porción del colon para ponerla en la entrepierna. Con el fin de prevenir que esa vagina quirúrgicamente construida se cierre al cicatrizar, los médicos (o los padres) realizarán "dilatación vaginal". Esto consiste en utilizar una serie de tubos de diferentes grosores para simular una penetración sexual.

Por lo menos 2000 niñ*s nacidos cada año en los Estados Unidos reciben este tratamiento. Eso significa cinco niñ*s cada día. A muchos de estos niñ*s se los somete a clitorectomía. Cada ciudad mediana o grande en los Estados Unidos tiene un equipo que se especializa en tratar a niños intersex. Muy pocos de esos equipos incluye siquiatras, sicólogos o trabajadores sociales. Ellos no hacen que las familias o los adultos intersex se conozcan porque creen que la intersexualidad es vergonzosa y que es mejor para las familias que no hablen del tema con nadie.

Aunque los doctores crearon este sistema de tratamiento de la Intersexualidad con las mejores intenciones (sanar sus heridas cartesianas y su heterosexismo) , ahora que las personas intersex han decidido hablar sobre su experiencia, sabemos que el tratamiento médico ha creado precisamente los mismos sentimientos de ser monstruos que l*s médic*s esperaban evitar. Las cirugías genitales dañan la sensación sexual e interfieren con la habilidad de la persona intersex de formar relaciones íntimas en la adultez. L*s niñ*s intersex perciben las inspecciones genitales frecuentes por equipos de doctor*s y estudiantes de medicina, y especialmente las dilataciones vaginales, como abuso sexual infantil, con similares consecuencias emocionales.

L*s adult*s intersex que recibieron este tratamiento en su niñez se han unido ahora a padres/madres, adultos progresistas, filósofos especialistas en ética, profesionales de la salud mental y doctor*s, para poner fin al tratamiento médico basado en el ocultamiento. El nuevo modelo centrado en el paciente requiere apoyo psicológico para los padres y las madres de niñ*s intersex. L*s niñ*s nacid*s con sexo ambiguo deben ser considerados y criados como personas con Derechos, basándose en la experiencia de cómo han crecido y desarrollado otras personas intersex. Pero se debe reconocer que el sexo de estos niñ*s es tentativo ( y así lo saben algunos padres de PFLAG cuy*s hij*s no tienen una anatomía diferente, pero acaban siendo transexuales) . L*s padres/madres, adultos responsables, deben conocer a otros padres/madres y a adultos intersex. L*s doctor*s deben ser sinceros y compartir con los familiares (y posteriormente con el niñ* intersex cuando esté en una edad de comprender la información) lo que saben (y lo que no saben) sobre el desarrollo de la Identidad de género y la Orientación sexual. Se debe reconocer como normal y natural el dolor de los familiares por tener un niñ* que es diferente y que sin duda enfrentará numerosas dificultades sociales, en lugar de tratar de evadir la situación usando promesas de soluciones quirúrgicas rápidas.

Recopilación:
Lic.Jorge Horacio Raíces Montero
Psicólogo Clínico
infopsicologia@ ciudad.com.ar
http://ar.groups.yahoo.com/group/Raices_ Montero

Coordinador Departamento Académico de Docencia e Investigación
CHA: www.cha.org. ar email: informacion@ cha.org.ar

Unión Civil y Matrimonio Homoparental-Revolución u homenaje de los herejes a la ortodoxia

Daniel Borrillo*

*: el uso del asterisco esta implementado para evitar usar el genérico masculino. La @ tampoco es conveniente en estos términos, ya que implica una derogada dualidad genérica y además es difícil leer por programas utilizados por personas ciegas o ambliopes... .....

El Derecho al Matrimonio y la Unión Civil entre personas de mismo sexo ha producido vivas críticas en dos campos históricamente opuestos. Por un lado las fuerzas conservadoras tradicionales y por el otro, l*s supuest*s detentores de la "vanguardia gay". Para l*s primer*s la reivindicació n de lesbianas, gays, bisexuales, travestis, transgéneros, intersexuales y transexuales pone en peligro "la familia", para l*s segund*s lo que corre riesgo es la misión "subversiva" del movimiento LGBTTTI.
El autor, a través de un análisis crítico de ambas posiciones, propone salir del debate ideológico para resolver los problemas prácticos a los que se confrontan diariamente las parejas atípicas.

La ideología conservadora
Coincidencia o estrategia común, lo cierto es que el 31 de julio del 2003 dos autoridades capitales del mundo occidental, el Vaticano y la Casa Blanca, se han pronunciado formalmente contra la Unión Civil y el Matrimonio Homosexual. Más allá de su carácter retrógrado, dichas declaraciones plantean un problema legal y moral de gran importancia que nos obliga a reflexionar acerca de la naturaleza jurídica de las nupcias. Contraer matrimonio y fundar una familia constituyen libertades fundamentales protegidas por el Derecho al mismo nivel que la Libertad de Expresión, la Propiedad Privada o la Libertad de Circulación. Hannah Arendt considera el casamiento como una elección vital y el primero de los derechos. Fundamento del núcleo familiar, el matrimonio instaura socialmente la unión de dos personas que tienen como objetivo común la solidaridad recíproca sobre la base del afecto mutuo. La Declaración Universal de Derechos Humanos, la Convención Europea, los Pactos de derechos civiles y políticos así como el conjunto de las constituciones modernas consideran al matrimonio como un Derecho Inalienable.

Si su origen es religioso, a partir de la Revolución francesa el matrimonio se convierte en una institución civil y laica. La controversia que opone la Iglesia a l*s LGTTTBI que desean casarse no se centra pues en un sacramento (de jurisdicción eclesiástica) sino en el derecho civil (jurisdicción federal).

La cuestión del matrimonio homosexual va mucho más allá de la simple equiparación jurídica de l*s homosexuales y l*s heterosexuales. La reivindicació n gay nos obliga a revisar aquello que nos parecía hasta hoy evidente. De lo que se trata en definitiva es de saber si la diferencia de sexos debe necesariamente constituir una condición al matrimonio.

Como todas las instituciones humanas, el matrimonio es el resultado de una construcción histórico-cultural. Las civilizaciones cambian y con ellas las instituciones reguladoras de las relaciones familiares. Las sucesivas modificaciones a las que se vio sometido el matrimonio, junto con la gradual aceptación de la homosexualidad, preparan el terreno jurídico para cuestionar radicalmente la exigencia de dualidad sexual como condición del ius connubi.
Recordemos que en el origen del derecho occidental, bajo el señorío del pater familias, el matrimonio romano organizaba la sociedad de los hombres libres y la mujer pasaba de la tutela de su padre a la de su marido. Junto al matrimonio legítimo de los ciudadanos de Roma, coexistían otras formas inferiores de unión: el concubinato (more uxorio) y el contubernio (unión entre esclavos). Dichas formas representaban los espacios de la "conyugalidad" de los marginales. El orden jerárquico de estas tres formas de nupcialidad (matrimonio legítimo, concubinato y contubernio) se prolonga durante la Edad Media. El primer paso hacia una concepción secularizada del matrimonio fue la proclamación del Edicto de Nantes en 1787 que otorgaba a los protestantes la posibilidad de beneficiarse del ius connubi sin pasar por el sacramento católico. En el siglo XVIII, las élites francesas soportaban cada vez menos la idea de una unión sagrada ad vitam.

Despojado de su naturaleza religiosa, el matrimonio laico instaurado por la Revolución francesa basa su legitimidad en la voluntad recíproca de las partes. En conformidad con la concepción civil, la alianza se basa exclusivamente en la libertad de los contrayentes. El derecho moderno pone fin de ese modo a la consumación (copula carnalis) e instaura el consentimiento como causa y legitimación de la unión.
Ni la reproducción, ni la ley natural, ni la forma litúrgica o la tradición pueden constituir argumentos válidos para oponerse a que las personas del mismo sexo contraigan nupcias. Si la reproducción constituyese una condición del matrimonio, l*s estériles, mujeres menopáusicas e impotentes no podrían casarse. Ninguna ley establece una obligación de reproducción. La legalidad del uso de técnicas contraceptivas de l*s cónyuges es la prueba de que no existe subordinación alguna de

la alianza a la reproducción.
Además, en las sociedades democráticas la tradición no puede representar un argumento válido para oponerse al matrimonio o a la unión civil entre personas del mismos sexo, so pena de cuestionar avances tales como la igualdad de las mujeres, la igualdad de las filiaciones, el derecho al divorcio y la patria potestad compartida, situaciones que han sido posibles precisamente gracias a la ruptura con la tradición. La desaparición del matrimonio indisoluble y la fragilización de familia tradicional no implican en absoluto una degradación de la vida familiar sino que, por el contrario, son el signo inequívoco de su democratizació n y de la realización individual de cada un* de l*s miembros de la familia. La reivindicació n de gays, lesbianas, travestis, transexuales, bisexuales, transgéneros e intersexuales, representa un paso adelante en el proceso hacia el pluralismo familiar que es fruto de la lucha de minorías excluidas históricamente de la institución matrimonial como por ejemplo l*s esclav*s, l*s "infieles" no católic*s, aquell*s que contraían uniones mixtas, interraciales e ínter confesionales. No olvidemos que los argumentos esgrimidos hoy contra las uniones homosexuales conllevan los mismos prejuicios que los utilizados en los Estados Unidos hasta fines de los años '60 o más recientemente en Sudáfrica contra

las uniones entre personas de diferente color de piel.
El rechazo de la unión entre personas del mismo sexo se basa en una idea monolítica y esencialista de la misma que tiene que ver con el sacramento y no con el derecho civil. No existen razones aceptables en el marco del debate democrático para abandonar el horizonte del derecho común y el principio de igualdad, privando de ese modo a ciertas personas del ejercicio de un derecho fundamental. Las referencias a la religión o a la moral tradicional, utilizadas otrora para condenar las uniones entre infieles o para justificar la dominación de las mujeres no deben interferir en el debate actual. El principio de laicidad establece que el Estado renuncia al ámbito religioso y que la religión se abstiene de interferir en el ámbito político.
El debate democrático debe confrontar argumentos que se basen en valores comunes, la metafísica de la diferencia de sexo como conditio sine qua non del matrimonio, tal como lo enuncia el documento del Vaticano y el texto del presidente Bush, no pueden constituir razones validas para abandonar valores democráticos como la libertad, la no discriminació n y la igualdad de todas las personas... independientemente de su orientación sexual o identidad de género.

Luego del movimiento por los Civil Rights y la lucha feminista, la igualdad de las parejas GLTTTBI constituye la reivindicació n política más importante de las sociedades modernas y no es extraño que las mismas fuerzas que en el pasado se opusieron a la igualdad matrimonial de l*s judí*s, l*s negr*s, l*s protestantes y l*s ate*s se encarnicen hoy día contra la minoría GLTTTBI. Después de todo, aunque haya cambiado su denominación por razones de imagen, el órgano católico que redactó la ofensiva contra l*s homosexuales no es otro que la sacro santa inquisición.

La ideología vanguardista
El matrimonio es una institución patriarcal hostil a lesbianas y gays. Reivindicar dicha institución significa someterse al orden heterosexista y renunciar a la vocación subversiva del movimiento LGBT. Existen otras prioridades en la lucha, consagrar la energía política a la domesticación de lesbianas, gays, transexuales, travestís y bisexuales es, de alguna manera, traicionar los ideales que fundaron la liberación homosexual. He aquí un resumen de los principales argumentos contra la Unión Civil y el Matrimonio Homosexual provenientes de "pensamiento progresista" . Dicho de otro modo, para estos nuevos detractores del Matrimonio Homosexual, la lucha por la igualdad de las parejas sería una suerte de homenaje de los herejes a la ortodoxia. Los principales argumentos utilizados por la "vanguardia" me parecen erróneos : en primer lugar confunde la causa con los efectos; se presupone que el movimiento LGBTTTI constituye un sujeto político monolítico; si homenaje hay es por

lo menos ambiguo.
Deberíamos recordar que lo que se reivindica es un derecho y no una institución. Más que de matrimonio o de unión civil, habría que hablar de Derecho al matrimonio y a la unión civil. Del mismo modo que el Derecho de l*s negr*s a la propiedad privada o de las mujeres al voto, no significó una adhesión a la ideología pequeño burguesa, el Derecho al matrimonio no debe confundirse con la institución matrimonial que merece sin duda alguna numerosas criticas. Pero creo que se confunde la causa con el efecto, no es el matrimonio el origen de la sociedad machista y homófoba sino el producto de ésta. En una sociedad donde las parejas de mismo sexo acceden al reconocimiento jurídico, tanto el Matrimonio como la Unión Civil cesarán de ser espacios heterosexistas. Cuando dos mujeres contraen matrimonio necesariamente desaparece el carácter patriarcal del mismo.

Encerrar al conjunto de LGTTTBI en una identidad compacta de tipo revolucionaria y considerar que ningún homosexual debe desear institucionalizar su vida familiar me parece adherir a una visión política más próxima al estalinismo que a la deliberación democrática. Existen homosexuales que viven fuera de la pareja y eligen otros modos de relacionamiento sexual y afectivo pero existen también much*s que desean una protección de su pareja (seguridad social, pensión, sucesión, acceso a la nacionalidad, representació n…). De todos modos, la sanción de una ley no obligara a l*s primer*s a casarse pero asegurara a l*s segund*s una estabilidad jurídica.
Por ultimo, el homenaje de l*s "herejes" a la ortodoxia me parece lo suficientemente ambiguo para producir el efecto "domesticador" que le atribuyen los "progresistas" .

De hecho cada vez que una minoría reivindicó el acceso al matrimonio este ultimo acabo por cambiar su fisonomía. Así, dejo de ser racista cuando l*s esclav*s y l*s negr*s pudieron casarse en las mismas condiciones que el resto de la población. Fue menos xenófobo cuando judí*s, protestantes y católic*s se beneficiaron de la misma ley civil. Fue menos misógino cuando las mujeres obtuvieron la igualdad y en el futuro el matrimonio será menos sexista cuando dos lesbianas podrán casarse y menos homófobo cuando la orientación sexual u la identidad de género, deje de ser una condición a dicha libertad fundamental. Ni revolucionaria ni conformista la lucha por el acceso a derechos iguales se inscribe en el respeto de los Derechos humanos.
La mayoría de los países europeos, Canadá y decenas de municipios reconocen ya a las parejas del mismo sexo. La Corte Europea de Derechos Humanos y los tribunales supremos de Ontario, Massachussets, Colombia Británica, Yukon… se han pronunciado a favor.

La Argentina se convertirá seguramente en el primer país latinoamericano a abrir el debate a nivel nacional y argumentos similares a los esgrimidos en los otros países tanto para oponerse como para defender la igualdad comienzan a ponerse en la escena pública.

Daniel Borrillo

*Profesor de Derecho Civil en la Universidad de París e investigador del Instituto de investigaciones científicas de Francia

Recopilación y actualización:
Lic.Jorge Horacio Raíces Montero
Psicólogo Clínico
infopsicologia@ ciudad.com. ar
http://ar.groups. yahoo.com/ group/Raices_ Montero

jueves, 16 de julio de 2009

Dawn: Pakistan reconose a las Travestis como IGUALES ante la Ley

El original en inglés puede consultars en:
http://www.dawn. com/wps/wcm/ connect/dawn- content-library/ dawn/news/ pakistan/ metropolitan/ 14-sc-orders- equal-benefits- for-transvestite s-zj-02
15 de julio de 2009 por Nasir Iqbar; Traducción por ?

[Nota: En la traducción de esta nota nos hemos apegado al texto original aun cuando ello implica utilizar palabras que Mulabi nunca utilizaría en sus propios textos. Por ejemplo: la nota se refiere en todo momento a “transvestites” (travestis) pero dado el contexto, sabemos que las personas aludidas se nombran a sí mismas como “hijras”, algo que el autor del texto o bien ignora o eligió omitir para que su público angloparlante no tuviera que leer una palabra “extraña”... (FORO DIVERSIDADES SEXUALES INADI)]

Las travestis Roop y Shazia salen de la Corte Suprema después de la decision de la misma Corte en sus favor en Islamabad.

ISLAMABAD: La Corte Suprema ordenó que las travestis, al ser ciudadanas paquistaníes iguales a todos los otros, también tienen derecho a los beneficios de los programas de asistencia financiera de los gobiernos federal y provinciales, así como del Programa Benazir de Apoyo a los Ingresos.

“Son ciudadanas paquistaníes y gozan de la misma protección que garantiza el Artículo Cuarto (derechos de los individuos que la ley ordena proteger) y el Artículo Noveno (seguridad personal) de la Constitución”, fue el veredicto dado a conocer el martes pasado por un tribunal formado por los jueces Muhammad Chaudhry, Muhammad Sair Ali y S Khawaja on Tuesday.

El tribunal había acogido favorablemente la petición que pedía la creación de una comisión para emancipar a los hombres afeminados a quienes la sociedad aísla sin que sean culpables de nada.
El jurista islámico Mohammad Aslam Khaki, que investigó las condiciones en que viven estas personas que entretienen pero también son despreciadas, descubrió que se trata del segmento social más oprimido y sometido a privaciones, más sujeto a humillaciones y acoso. Fue él quien presentó la petición por el bienestar de las travestis a quienes la sociedad sólo permite ganarse la vida mendigando, danzando y prostituyéndose.

Los padres entregan a sus hijos hermafroditas al cuidado de gurués (líderes de las travestis) a una muy tierna edad. Esos niños son sometidos a abuso en lugar de brindárseles la oportunidad de acceder a la educación.

El Dr. Khaki se convirtió en defensor de esta causa luego de que la policía hiciera una razzia y detuviera a varias travestis en Taxila (un sub-distrito cercano a la capital del país, Islamabad) recientemente, argumentando frente al tribunal que dado el que estado paquistaní es un estado de bienestar, el gobierno tenía la responsabilidad de cuidar de esta comunidad. Dijo también que (el famoso director de cine) Shoaib Mansur, creador de la exitosa película “Khuda ke Liye”, estaba planeando filmar una película para denunciar las miserables condiciones de vida de estas personas.

Durante el juicio (las travestis) Rup y Shazia así como otras representantes de su comunidad, se presentaron como testigos y narraron detalles espeluznantes acerca del maltrato a que las someten la sociedad, la policía y los gángsters, debido a su difícil situación económica, causada especialmente por el hecho de que sus padres y sus hermanos no las aceptan como parte de la familia.

“Haberme presentado hoy frente al tribunal me puede costar la vida”, temió Shazia, agregando que estaba recibiendo amenazas de distintos sectores. “Una vez me hicieron acusaciones falsas y luego la policía me sometió a tortura sexual mientras me tuvo detenida”, acusó.

El tribunal pidió a los gobiernos federal y provinciales que las ayuden a superar sus dificultades financieras apoyándolas con programas como el ya mencionado BISP, el Baitul Mal o los programas provinciales de apoyo para que puedan optar por ganarse la vida en forma respetable.

El tribunal también pidió al peticionante que negociara con las organizaciones no gubernamentales que trabajan en problemáticas sociales para que crearan programas de ayuda social para travestis.

El fallo también pide a los departamentos de bienestar social de los gobiernos provinciales que presenten propuestas para mejorar la situación de estas personas, aliviando sus desdichas y dificultades.

Para protegerlas de los malhechores, el fallo ordenó a las fuerzas encargadas del cumplimento de la ley que brinden seguridad a estas personas para que no se les violen sus derechos. También pidió que las autoridades policiales actúen contra los agentes delincuentes que hostigan a las travestis.

El tribunal dio instrucciones a los departamentos de bienestar social de las provincias para que lleven a cabo una encuesta y un registro de travestis para salvarlas de una vida signada por la vergüenza.

Tanto el peticionante como las travestis presentes en el tribunal dijeron que estas últimas se veían obligadas a llevar una vida inmoral ofreciéndose como bailarinas o prostitutas, y que también se veían obligadas a pagar sobornos muy elevados a los auto-denominados gurúes o a la policía.

“En ningún lugar la sociedad nos acepta; en todas partes nos degradan y nos humillan”, dijeron las travestis.

El tribunal resaltó que por tratarse de musulmanas así como seres humanos, los padres de estas criaturas confusas en cuanto a su género deben cuidarlas sin discriminació n alguna pero en cambio, se lamentó, lo que hacen es arrojarlas a la calle para que sufran por el resto de su vida.
El tribunal también expresó su azoramiento por el hecho de que la tarjeta nacional electrónica de identidad de uno de los eunucos contiene la fotografía de una mujer pero en la columna de “género”, se la identifica como “masculino”.


El tribunal entró en receso hasta la tercera semana de agosto.

Critica: El asiento de atrás [Matrimonio o Unión Civil]

http://bbimbi.blogspot.com/2009/07/contratapa-de-critica-de-la-argentina.html
16 de julio 2009 por Bruno Bimbi

Había una vez una humilde modista negra llamada Rosa Parks. Era negra en una época y un lugar en el que ser negro era difícil. Nació en 1913, en Montgomery, Alabama, uno de los estados más racistas de ese sur de los Estados Unidos que fue a la guerra contra la abolición de la esclavitud.

En Alabama, la ley reglamentaba cómo debía sentarse la gente en el colectivo: los blancos, adelante; los negros, atrás. Estaba prohibido que personas “de distinto color” se sentaran juntos y si un blanco pedía el asiento, todos los negros de la fila debían levantarse y buscar lugar en la parte trasera. Calladitos y sin discutir.

Rosa Parks discutió. Dijo que no, que no, que no. El chofer, James Blake, ya la conocía: la había bajado a empujones doce años atrás. Pero era diciembre de 1955, Rosa Parks ya llevaba 42 años siendo negra y estaba cansada de maltrato. Tres hombres negros dejaron sus lugares; Rosa Parks no.

–Voy a pedir que te arresten –dijo Blake.

–Podrías hacerlo –respondió ella, sin imaginarse que esas cuatro palabras (en inglés, “You may do that”) pasarían a la historia.

Rosa Parks terminó presa y condenada a pagar una multa de 14 dólares. Martin Luther King, hasta entonces un desconocido pastor bautista de Montgomery, organizó un boicot contra el transporte público que duró 382 días. Los negros resolvieron caminar. Aunque debieran recorrer kilómetros a pie, no se sentarían más en la parte de atrás. Finalmente, la Corte Suprema declaró inconstitucional la ley de los asientos y esa victoria dio lugar a otras batallas contra la segregación racial en Estados Unidos.

Hoy, el presidente de ese país es un negro que a mediados del siglo pasado habría tenido que ceder su asiento. Cuando Obama, que hoy es abogado, tenía apenas un año, el estudiante negro James Meredith intentó matricularse en la Universidad de Misisipi y hubo violentas manifestaciones racistas para impedírselo. El presidente JFK tuvo que mandar 3 mil soldados y 400 agentes federales para protegerlo. Hasta que un fallo de la Corte lo prohibió en 1954, por la demanda de un padre negro de Kansas que no aceptaba como única opción para su hijo las “escuelas para negros”, varios estados autorizaban la segregación racial en colegios y universidades.

Con todos esos cambios tuvo que ver esa señora que dijo que no. Por eso, cuando me piden que explique la diferencia entre la legalización del matrimonio entre personas del mismo sexo y la alternativa que algunos políticos nos ofrecen, la “unión civil”, siempre empiezo contando la historia de Rosa Parks.

Antes de que pusiéramos el debate sobre el matrimonio en la agenda pública, algunos de esos políticos se opusieron a la ley porteña que, pese a la importancia cultural que tuvo, no nos da derecho a casi nada. Pero ahora dicen que aceptarían reconocernos derechos con la condición de no usar la palabra “matrimonio”. Pasó lo mismo en España: el PP rechazó por años la unión civil y, cuando vieron que se venía el matrimonio, salieron a ofrecerla como grandes demócratas.

A Rosa Parks no la obligaban a viajar parada. Atrás había asientos igual de cómodos. Donde hubo bares y restaurantes “sólo para blancos”, había otros para negros. Nadie les negaba el derecho a almorzar o tomar un café, pero no acá. Imaginemos que una ley dijera que los negros no se pueden casar, porque el matrimonio “es para blancos”, y les ofrecieran una “ley de uniones negras”. ¿Ponerle otro nombre a sus matrimonios sería trivial?

La discusión sólo tiene sentido si entendemos lo que está entre líneas: “Hay que dejar en claro de algún modo que ustedes son diferentes”. Nos están diciendo que aceptarán (¡al fin!) nuestro derecho a viajar sentados. Que aceptarán que tengamos algunos derechos materiales que hoy nos niegan (herencia, obra social, pensiones), pero que nunca permitirán que a nuestras familias se les reconozca simbólicamente el mismo valor. Nuestra capacidad de amar y de construir un proyecto de vida junto a otro ser humano no merece para ellos el mismo nombre porque no creen que valga lo mismo. Que nosotros valgamos lo mismo. Y quieren que esa diferencia siga plasmada en la ley, para que las futuras generaciones lo sepan.

Decir que queremos los mismos derechos con los mismos nombres significa, entonces, decir que no aceptaremos que nos manden al asiento de atrás.

miércoles, 15 de julio de 2009

Pagina 12: SOY: La voz de los excluidos

26 de junio 2009 por Carlos Figari

Stonewall es, sin duda, el mito de origen de la lucha por la identidad homosexual en el mundo occidental. En el contexto de un mundo que parecía “deshacerse en el aire”, Stonewall no implicó sólo la resistencia en Greenwich Village, animó y posibilitó la visibilización de grupos, la publicación de periódicos y la organización de “marchas” reivindicativas. Por la misma época, en una América latina de especial efervescencia política, los movimientos de liberación homosexual se insertarían en la disputa ideológica que atravesaba a los nuevos movimientos sociales. Salvo en la Argentina, donde el Frente de Liberación Homosexual, conformado en 1971, consiguió mantener una línea, más o menos clara, de afiliación —o más bien el intento de— con la izquierda, el resto se debatía entre posturas muchas veces inconciliables. Una línea era de tinte anarquista, ponía el acento en la reflexión sobre el ser homosexual, vivencias y represiones. Otra, desde el marxismo, señalaba que ésta era una instancia de lucha menor, que debía insertarse en la lucha política mayor por un hombre nuevo, en una sociedad sin clases y, supuestamente por ello, sin diferencias sexuales.

A mediados de la década del ’80, los grupos que fueron abandonando la designación homosexual organizándose por sus especificidades, planteaban ahora objetivos integracionistas, es decir, mejorar su posición en la sociedad combatiendo el estigma y ampliando su base de derechos. Ya no estaba en juego la lucha contra el capitalismo sino la mejor manera de ser reconocidos. El problema es que también comenzó a visibilizarse que, con un pie en el mercado, la política del “gay ciudadano” se confundía por momentos con la del “gay consumidor”. En los EE.UU., así, desde las diferencias hacia el interior de la propia comunidad Glttbi, feministas negras y chicanas criticaron el denominado “solipsismo blanco de clase media”. Es decir, una identidad vista y construida desde la posición del gay, varón, blanco y de clase media.

En el mismo sentido, en Brasil, el grupo negro feminista Criola advierte: “El color de la piel aquí define si se consigue sobrevivir al primer año de vida”, mucho antes de decidir su orientación sexual. Las travestis son quienes en la Argentina, a partir de su lucha contra el artículo 71 del Código Contravencional en Buenos Aires, mostraron los límites de la política de reconocimiento. Plantearon sus reclamos, no sólo en términos de identidad sino del acceso a los derechos de trabajo, educación, salud. Es decir, reconectaron el conflicto cultural con el material, devolviendo a la política de la diversidad su carácter crítico.

No obstante, el campo se complejizó y bajo el amparo de un creciente paraguas de derechos se fue consolidando una “cultura gay” que respondió precisamente al estilo de vida y pautas de consumo globalizado propios de la clase media de los países centrales.

Esto hoy se ha convertido en un verdadero boomerang, precisamente para las propias políticas de reconocimiento.

Cuando el 1º de mayo de 2006 los trabajadores latinos decidieron hacer un boicot a la economía norteamericana, pregunté a un amigo gay californiano si apoyaba esta medida. Con un odio visceral no sólo me respondió que esto le parecía inaceptable, sino que “los mexicanos debían volverse a su país con sus veinte mugrosos hijos”. Hoy esos veinte y muchos miles más se la devolvieron con el plesbicito en que ganó el No al matrimonio homosexual en California.

La misma metáfora aparece cuando un gay massmediático (sí, porque ya son toda una categoría específica) como Piazza comete la impudicia de hablar en nombre de “los gays” y sus derechos ciudadanos. Se muestra entre los vips del cholulismo antidiscriminación, posa para todas las fotos con Lubertino y pretende que la Presidenta asista a su frívolo casamiento, de dudoso gusto y ostentación compulsiva, como una forma de apoyar el derecho al matrimonio gay. Al mismo tiempo no duda en pedir al Estado “matar” a todos “esos negros de mierda, hijos de puta” y/o “pobres morochitos de la villa”.

Por suerte —para todos nosotros—, a la Cenicienta le tocaron sus doce y la carroza volvió a ser un zapallo. A 40 años de Stonewall, quizá la reflexión más certera sea siempre plantearnos a quiénes excluimos cuando nos erigimos en la voz de los excluidos, cualquiera fuese el lugar desde donde lo hagamos.

miércoles, 8 de julio de 2009

ATTTA: El DIARIO GOLPISTA LA NACION PERSIGUE A LA COMUNIDAD TRANS

Asociación de Travestis, Transexuales y Transgéneros de Argentina (ATTTA)
8 de julio 2009

Repudiamos el permanente hostigamiento que el diario “La Nación” viene realizando contra el colectivo trans en diversos artículos, entre ellos el del día 26 de Junio de 2009 donde el Señor Hanglin desmerece la construcción de la identidad Trans a partir de su planteo transfóbico de que esta identidad es producto de un millonario negocio por parte de un tipo de homosexuales.

El lunes próximo pasado el mismo diario publica un artículo donde, por un lado se dirige a las personas trans en masculino e insiste en que son las causantes de la falta de higiene del predio de al que fueron confinadas detrás del Low tennis club por parte del gobierno de la ciudad de Buenos Aires.

Repudiamos por todo esto, la campaña en contra de nuestro colectivo por parte del diario y no comprendemos la intencionalidad de fondo respecto de la actitud adoptada por dicho diario.

Es escandaloso el sufrimiento, la exclusión social, el maltrato y hasta los crímenes de odio a que son sometidas las compañeras de nuestro colectivo, para que encima tengamos que soportar toda una campaña en contra por parte de un medio de comunicación al que al parecer le interesa más la limpieza del Parque o la apariencia social, que las verdaderas causas por las que la mayoría de nuestras compañeras tiene que dedicarse al trabajo sexual. Porque desde muy jóvenes, al querer construir su identidad sexual son expulsadas de sus familias y la imposibilidad de acceso al sistema de salud, de educación, trabajo, vivienda digna y a la justicia como cualquier otra u otro ciudadana, ciudadano de la Nación.

La mayoría de nosotras somos asesinadas por la policía y grupos transfóbicos, que es altísimo el nivel de transfobia social que llevan al maltrato que nos imposibilita la libre circulación por la sociedad. Muchas de nosotras no accedemos a los sistemas de salud por la falta de reconocimiento de nuestra identidad de género, somos permanentemente perseguidas por la policía donde nuestros derechos básicos como personas no son ni por lejos respetados.

Por todo esto no permitiremos más hostigamiento por parte de este diario y que de ahora en más tomaremos medidas que pongan en evidencia esta acción transfóbica que continúan acentuando aquellos prejuicios sociales que nos degradan frente a la sociedad, acentuando la desinformación social sobre nosotras, estigmatizándonos y relegándonos al último lugar social, propiciando el hostigamiento, el maltrato y los crímenes y persecución a las que somos sometidas como colectivo trans.

Marcela Romero

martes, 7 de julio de 2009

Jacqueline Celeste Caminoa, UCR ha firmado nuestra Encuesta

7 de julio 2009 por Patrick y Claudia

La candidata a senadora nacional por la UCR, Jacqueline Celeste Caminoa, ha ayer contestado afirmativamente a las cuatro preguntas de la encuesta de la FALGBT, un poco tarde, pero válido al fin. Ella nos escribió:
"Disculpá la demora, estoy de acuerdo con todas las preguntas que me hacés. Tenía dudas con la primera (por cuestiones religiosas y no de discriminación) , pero tras una conversación con mi hija entiendo que es necesario avanzar en ese tema también. Un abrazo".

La primera pregunta habla del matrimonio gay. Podés leer la Encuesta acá.